500 Poemas de amor 

No dejes de visitar los 50 mejores poemas de Yavendrás, según vuestros votos.

Una lágrima

Enviado por gonci  Seguir

Una lágrima de tus ojos cayó
una lágrima de amor
que en tu mejilla se posó
con el brillo de la estrella más bella.
Lágrima que de pasión me llenó.

Quise ser esa lágrima
que en tu rostro se deslizó
y en tus labios se detuvo
con el sabor de la miel más dulce.
Lágrima que de tu boca
con mis besos sequé

Una lágrima de tus ojos brotó
una lágrima de amor
que encendió mi corazón,
lágrima que de ternura me llenó.

Y yo quise secar esa lágrima
que de tu pestaña calló
que de tus ojos brotó
con brillo de luna clara.

Lágrima que de ti me enamoró.
Una lágrima que de tus ojos rodó
una lágrima de amor
que en mi pecho se anidó
y me abrió tu corazón

90.91%

votos positivos

Votos totales: 11

Comparte:

DISCIPLINA SECRETA

La casa como barco
en alta mar de junio.

Las calles como trenes
de noche sosegada.

Estas cosas no pasan en el mundo.

Estoy por afirmar
que ahora vivo en un libro de poemas.

Pero si tú me miras,
decidida a existir
desde el fondo templado de tus ojos,
también existe el mundo.

Y muy probablemente
yo acabaré por existir contigo.

Autor del poema: Luis García Montero

90.74%

votos positivos

Votos totales: 216

Comparte:

EL AMOR

El amor viene lento como la tierra negra,
como luz de doncella, como el aire del trigo.
Se parece a la lluvia lavando viejos árboles,
resucitando pájaros. Es blanquísimo y limpio,
larguísimo y sereno: veinte sonrisas claras,
un chorro de granizo o fría seda educada.

Es como el sol, el alba: una espiga muy grande.

Yo camino en silencio por donde lloran piedras
que quieren ser palomas, o estrellas,
o canarios: voy entre campanas.
Escucho los sollozos de los cuervos que mueren,
de negros perros semejantes a tristes golondrinas.

Yo camino buscando tu sonrisa de fiesta,
tu azul melancolía, tu garganta morena
y esa voz de cuchillo que domina mis nervios.
Ignorante de todo, llevo el rumbo del viento,
el olor de la niebla, el murmullo del tiempo.

Enséñame tu forma de gran lirio salvaje:
cómo viven tus brazos, cómo alienta tu pecho,
cómo en tus finas piernas siguen latiendo rosas
y en tus largos cabellos las dolientes violetas.

Yo camino buscando tu sonrisa de nube,
tu sonrisa de ala, tu sonrisa de fiebre.
Yo voy por el amor, por el heroico vino
que revienta los labios. Vengo de la tristeza,
de la agria cortesía que enmohece los ojos.

Pero el amor es lento, pero el amor es muerte
resignada y sombría: el amor es misterio,
es una luna parda, larga noche sin crímenes,
río de suicidas fríos y pensativos, fea
y perfecta maldad hija de una Poesía
que todavía rezuma lágrimas y bostezos,
oraciones y agua, bendiciones y penas.

Te busco por la lluvia creadora de violencias,
por la lluvia sonora de laureles y sombras,
amada tanto tiempo, tanto tiempo deseada,
finalmente destruida por un alba de odio.

Autor del poema: Efraín Huerta

90.58%

votos positivos

Votos totales: 138

Comparte:

Ausencias

Enviado por ron2039  Seguir

Son estas noches en que siento que me hace falta algo
sentirse incompleto como a un niño que le hace falta su helado
la diferencia es que no soy un niño
ni mucho menos busco algo barato.

Soy el resultado de la rutina
soy el producto de una madrugada que no termina
soy aquel que siempre está pensando en ti
soy la persona que no te puede arrancar de su vida de raíz.

Lo más triste es que tú no sabes nada
no te culpo, mi cobardía no me permite decirte lo que siento
y aunque siempre me he preguntado si en tu mente yo permanezco…
estoy seguro que en partes de tu día te aparezco.

Esta es la misma historia de siempre
dos personas, dos amigos, dos confidentes, dos conocidos,
dos que comparten momentos y entregan todo
dos personas que se volvieron costumbre.

¿Cómo quitarte a alguien de tu mente si ya te ha cautivado lo suficiente?
entraste como si nada cuando menos me di cuenta
te apoderaste de mí ser, de mis costumbres y me obligaste a ser diferente
y ahora estás allí como si nada esperando a que te mienta,
esperando a que aparente que me importas menos de lo que piensas,
entiendo que tienes a tu pareja,
pero es solo un payaso que siempre te trae problemas,
sin embargo no te ves feliz con como todo el mundo piensa.

Niña, niña… te conozco poco, pero valoro cada cosa de ti,
admiro tu forma de ser tan peculiar,
viviendo siempre estresada pero dispuesta a seguir,
admito que muchas veces me comporto como un idiota,
pero no quiero hacerte notar lo muerto que estoy por ti.
Seguiré pendiente de ti siempre con ímpetu,
pero esta noche siento que algo me falta…
esta noche me haces falta tú.

90.48%

votos positivos

Votos totales: 21

Comparte:

QUE YO SIEMPRE AMÉ

Que yo siempre amé
yo te traigo la prueba
que hasta que amé
yo nunca viví -bastante-

que yo amaré siempre
te lo discutiré
que amor es vida
y vida inmortalidad

esto -si lo dudas- querido,
entonces yo no tengo
nada que mostrar
salvo el calvario

Autor del poema: Emily Dickinson

90.24%

votos positivos

Votos totales: 369

Comparte:

Juntar el viento.

Enviado por lilith  Seguir

La ciudad esta vacía

Corre una brisa suave de verano

El sol calienta la arena

Hay un tranvía abandonado

El viento susurra tu nombre

y quiero juntar el viento

Juntar el viento

Para verte de nuevo



Tus ojos atraviesan el mar

En estas calles abandonadas

El cielo es azul

Mis alas fueron cortadas

Bajo el amanecer

El viento se junta

Matando el tiempo

Vi a través del cristal roto

Estabas tu.

90.24%

votos positivos

Votos totales: 41

Comparte:

PALABRAS DE AMOR

Él me quiso tanto...
Yo aún sigo enamorada.
Juntos atravesamos
una puerta cerrada.

Él, cómo os diría...
era toda mi ocupación,
cuando en la lumbre ardían
sólo palabras de amor...

Palabras de amor sencillas y tiernas
que echamos al vuelo por primera vez,
apenas tuvimos tiempo de aprenderlas,
recién despertábamos de la niñez.

Nos bastaban esas tres frases hechas
que entonaba un trasnochado galán,
de historias de amor, sueños de poetas,
a los quince años no se saben más...

Ella, dónde andará,
tal vez aún me recuerda.
Un día se marchó
y jamás volví a verla.

Pero, cuando oscurece,
lejos, se escucha una canción,
vieja música que acuna,
viejas palabras de amor…

Autor del poema: Joan Manuel Serrat

90.00%

votos positivos

Votos totales: 30

Comparte:

AMOR Y UNA PREGUNTA

Un extraño llegó hasta la puerta en el ocaso,
Y habló con el justo novio.
Llevaba una vara blanca y verde en la mano,
Que a su vez sostenía todas sus cargas.
Preguntó, más con los ojos que con los labios,
Si habría refugio para él durante la noche,
Y se volvió para mirar la distancia del camino,
Sin luces ni ventanas iluminadas.

El novio dio un paso y cruzó la puerta diciendo:
Miremos hacia el cielo,
Y preguntemos por la noche que vendrá,
Tú y yo, extraño compañero.
Las hojas de la vid cubrían el patio,
Los frutos de la vid eran azules,
Otoño, si, pero el invierno estaba en el viento;
Extraño, ojalá lo supiera.

Dentro, la novia yacía sola en el atardecer,
Inclinada sobre el fuego del placer,
Su rostro brillaba rojo frente al carbón,
Y rosa era el deseo y el pensamiento del corazón.

El novio observó el camino desgastado,
Sin embargo la vio a ella en el interior,
Y deseó su corazón en un cofre de oro,
Inmóvil con un alfiler de plata.

El novio pensó en un pequeño regalo,
Algo de pan, una bolsa para el descanso,
Una oración sincera por los pobres de Dios,
O para los ricos una humilde maldición.

Pero si aquel extraño fue consultado o no,
Sobre la muerte del amor de dos,
Por albergar la pena en la noche que vendrá,
El novio nunca lo supo, pero deseó saberlo.

Autor del poema: Robert Frost

90.00%

votos positivos

Votos totales: 40

Comparte:

Tu caballero

Enviado por lufealfe  Seguir

Mi querida señorita, a través de versos y escritura, quiero expresar cada una de mis partituras, cada una de mis emociones, cada una de mis conclusiones hacia ti.

Adorable ser del cielo que mi mente repletas de lujuria y cada parte de mi ser inundas con anheló.

Mi deseo es observar aquella sonrisa que brilla en el cielo.

En mi ser no logro distinguir ningún otro sentimiento que no sea amor y deseo.

Mi bella dama inalcanzable como la más lejana estrella, pero, sin importar aquello este humilde vasallo trabajará incansablemente para volverme tu caballero, con mi espada te juro lealtad y con mi escudo te guardaré de todo mal.

Magnánima dama, mi espada y escudo están destinados para protegerte y aunque me faltará alguno de ellos, dispondré mi pechera para salvaguardarte y aunque mi cuerpo no fuese lo suficiente, mi espíritu estará para protegerte

90.00%

votos positivos

Votos totales: 10

Comparte:

EL TIERNO Y PELIGROSO ROSTRO DEL AMOR

El tierno y peligroso
rostro del amor
se me apareció una noche
después de un día muy largo
Era quizá un arquero
con su arco
o bien un músico
con su arpa
Yo no sé más
Yo no sé nada
Todo lo que yo sé
es que me ha herido
quizá con una flecha
quizá con una canción
Todo lo que yo sé
es que me ha herido
herido en el corazón
y para siempre
Ardiente demasiado ardiente
herida del amor.

Autor del poema: Jacques Prévert

89.74%

votos positivos

Votos totales: 39

Comparte:

Desde el 21 hasta el 30 de un total de 500 Poemas de amor

Añade tus comentarios