NEVER MORE
Oh, recuerdos, recuerdos! ¿qué me queréis? Volaba
un turbión de hojas secas; ponía el sol un brillo
de oro viejo en el bosque húmedo y amarillo,
y la fugaz llovizna de otoño sollozaba.
Ibamos los dos solos; su cabellera de oro
volaba loca al viento, cual nuestra fantasía.
— ¿Cuál fue el día más bello de tu vida?— decía
junto a mí, con su acento angélico y sonoro.
Respondió a su pregunta mi sonrisa discreta;
después, devotamente, con gesto de poeta,
besé su mano blanca de dedos afilados.
¡Ah, qué fragancia tienen nuestras primeras rosas
y qué bien suena, como músicas deliciosas,
el primer sí que brota de unos labios amados!
Autor del poema: Paul Verlaine
Añade tus comentarios