ANGELES
16 Abril 2023, 19:07
No sabes cuánto quise saber cómo era tu forma de ser.
No tengo palabras
estrella fugas de media noche,
en blanco y negro te miro,
tu perfume de perfil,
solo el broche de tu sostén te puede corregir,
hermosa de ojos cafés, blanca de pierna perfecta,
tus caderas hipnotizan,
mis bajos instintos con tinta los calmó o leyendo algún salmo,
cuando te veo de amor mi cerebro se reinventa,
soy peón,
pero por ti, navegó como alfil,
en la oscuridad y en la luz no te dejo de pensar...
Árbol de mi claridad,
por qué tú habitad es sobre el musgo verde, yo Viví feliz,
nos cubre la soledad,
nunca seremos de aquí,
la sonrisa tan discreta,
de repente usa violeta,
la constancia inerte de mí caminar somete a contemplar el libre canto de un clarín
¿ha de ser así tu voz?
Más suave que la pluma de colibrí.
Indescifrable mirada en las pupilas de este ciego, trato,
pero no te veo y creo que estoy consciente de tu existencia,
no podré negarlo,
si eres espíritu que vaga en este efímero pensar,
dueña de mí,
a y que el destino no me permite abrazar,
deambulando en el fondo de peligrosas cañadas en esos momentos de soledad me volvió el recuerdo de tus dulces ojos.
Debo de aceptar que tú nunca serás algo de aquí,
solo sé que yo te escribo,
solo sé que ya te amo
y que cuando tú me digas desaparezco y aparezco bajo el fresno al momento de la helada
el sereno de tu voz que me adormece y no se siente,
al entender que ya divago,
por sentir el aire por dejar el suelo barro,
voy a esconder bajo
mi cuello tu caricia de placebo pienso en ella,
pero estoy consciente que nunca pasará,
¿que te hace personal?
-que quiero morir junto a ti.