106 Poemas de soledad
SOLEDAD TARDÍA
Soledad, bien te busqué
mientras tuve compañía...
Soledad, soledad mía,
viniste cuando se fue ...
De sus brazos me escapé
cuando en sus brazos dormía;
estar a solas quería
sin adivinar por qué.
Toda la noche vagué
por verte, soledad mía;
regresé rayando el día,
y dormida la encontré.
De puntillas me alejé
burlando su compañía
por hallarte, y no te hallé;
pero un día
que volví, no la encontré...
¡Ay, mi soledad tardía
viniste cuando se fue!
Lloré porque no podía
hallarte, soledad mía,
y lloro porque te hallé...
lo oculto
La ansiedad me mata, me voy acoplando a la soledad, que pasa?
El sentirme apartada ya no me afecta, ya me di cuenta que estoy bien así, no necesito a nadie para estar bien o si?
Mi cabeza se contradice, mis lagrimas brotan cada vez mas, eso me afecta, pero que es eso?
Que es eso que me tiene en insomnio todas las noches, que hace que sienta inútil, que me aparta de todos y de todo, no se si querer cambiar, pero que cambiar si solo me estoy consumiendo poco a poco sola y no me doy cuenta
Quiero pasar la mano por mi cuerpo y no sentir lo uniforme que esta
Mi espejo se fractura junto conmigo
Mi mente se agobia sin tener respuestas
Porque no puedo mirarme al espejo con gusto?
Sigo esperando ese calor que le de sentido a mi vida y me lleve a e sentimiento de no volver a recaer
Esta cuenta regresiva pronto acabara?
SOL(EDAD) LA EDAD DEL SOL
Es un hecho. El sol tiene los mismos años que la soledad.
―Ya no puedo seguir así ―le dijo el sol al Universo―. Lo doy
todo por ellos y nadie da nada por mí. Universo, ya no puedo más. Me
quiero morir.
―Si quieres morir, enamórate ―le respondió el Universo―.
Ama. Nacer para morir es un suicidio sin elección; no es libertad, mi
querido sol. Yo que tú…elegiría ser libre, elegiría enamorarme…elegiría
ser asesinado por la compañía de otro corazón…Querido sol,
¡estréllate!
Y fue en ese momento, cuando el sol decidió dejar de estar
solo; decidió dejar marchar a la soledad.
Y la soledad, ―la muy cabrona― encontró en la humanidad, a
su más fiel compañera.
SOLEDAD
Si das un paso más te quedas sola...
En el umbral de un tiempo
que no es el tuyo aún y no es ya el mío.
Sobre el primer peldaño
de una escalera rápida que nadie
podrá jamás decir si baja o sube.
En el principio de una primavera
que, para tu patético hemisferio,
nunca resultará
sino el reverso casto de un otoño...
Porque la frágil hora
en que tu pie se apoya es un espejo,
si das un paso más te quedas sola.
GANSOS SALVAJES
No tienes que ser buena.
No tienes que atravesar el desierto
de rodillas, arrepintiéndote.
Solo tienes que dejar que ese delicado animal
que es tu cuerpo ame lo que ama.
Cuéntame tu desesperación y te contaré la mía.
Mientras tanto, el mundo sigue.
Mientras tanto, el sol y los guijarros cristalinos
de la lluvia avanzan por los paisajes,
las praderas y los árboles frondosos, las montañas y los ríos.
Mientras tanto, los gansos salvajes, que vuelan alto
en el aire azul y puro,
vuelven nuevamente a casa.
Seas quien seas, por muy sola que te sientas
el mundo se ofrece a tu imaginación,
y te llama, como los gansos salvajes, chillando con excitación
anunciando una y otra vez
tu lugar en la familia de las cosas.
Soledad profunda
Enviado por patrik_1925 Seguir
Solo el escritorio y yo,
yo y la soledad profunda,
solo quería la paz interior.
No hay paz sin el sufrimiento
lo entendí en el momento
que sentí que faltaba algo.
algo que llene un vacío.
La soledad profunda y yo,
la soledad que atormenta,
la que me impide dormir bien,
la que causa este vacío.
Si me preguntan de algún dolor,
no responderé a su pregunta,
ya que la tristeza me gana,
y el dolor me llega a ganar.
¡OH, SÍ!
Hay cosas peores que
estar solo
pero a menudo toma décadas
darse cuenta de ello
y más a menudo
cuando esto ocurre
es demasiado tarde
y no hay nada peor
que
un demasiado tarde.
SOLO
Desde el tiempo de mi infancia no he sido
como otros eran, no he visto
como otros veían, no pude traer
mis pasiones de una simple primavera.
De la misma fuente no he tomado
mi pesar, no podría despertar
mi corazón al júbilo con el mismo tono;
Y todo lo que amé, lo amé Solo.
Entonces -en mi infancia- en el alba
de la vida más tempestuosa, se sacó
de cada profundidad de lo bueno y lo malo
el misterio que todavía me ata:
Del torrente, o la fuente,
Del risco rojo de la montaña,
Del sol que giraba a mi alrededor
en su otoño teñido de oro,
Del rayo en el cielo
cuando pasaba volando cerca de mí,
Del trueno y la tormenta,
Y la nube que tomó la forma
(Cuando el resto del Cielo era azul)
De un demonio ante mi vista.
Abismo sin aviso
Enviado por jeysonveliz Seguir
Y de repente sin previo aviso, sin señal, sin motivo alguno, sin provocación, sin culpa ni sentimiento, solo el persar de sentir, el pesar de vivir, adentrandote en un mundo el cual creias desconocido, un mundo frio, en el cual te sientes atrañado, sin escape alguno, teniendo la unica certeza de estar vivo, sin poder sentirlo, vivir sin disfrutar nada de los sentimientos encontrados, dandote cuenta de lo solo que te encuentras, pensando "porque?".
Dandote cuenta que en el abismo recurrente de tu mente no hay mada mas que una megatividad, una impotencia, una soledad, sintiendo una anciedad de ser amado, escuchado, una nesecidad de ser feliz
Pero lo unico que encuentras
Es un abismo sin aviso
(Es el primer poema que escribo
Espero les guste)
NOCHEBUENA
Fernando Silva dirige el hospital de niños en Managua.
En vísperas de Navidad, se quedó trabajando hasta muy tarde. Ya estaban sonando los cohetes, y empezaban los fuegos artificiales a iluminar el cielo, cuando Fernando decidió marcharse. En su casa lo esperaban para festejar.
Hizo una última recorrida por las salas, viendo si todo queda en orden, y en eso estaba cuando sintió que unos pasos lo seguían. Unos pasos de algodón; se volvió y descubrió que uno de los enfermitos le andaba atrás. En la penumbra lo reconoció. Era un niño que estaba solo.
Fernando reconoció su cara ya marcada por la muerte y esos ojos que pedían disculpas o quizá pedían permiso.
Fernando se acercó y el niño lo rozó con la mano:
—Decile a... —susurró el niño—. Decile a alguien, que yo estoy aquí.
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