27 Poemas de canciones 

MUCHACHA

Piensa en mí, muchacha, piensa en mí
cuando las brujas te arañen por la mañana.
No te haré más tibio el frío
ni más dulce el café con leche
pero piensa en mí,
muchacha,
piensa en mí.

Piensa en mí cuando no te llegue el sueldo
o cuando te rocen en el metro a las ocho y pico.
Y llévame
bordado en tu blusa
o pintado en tu sonrisa roja.

Colúmpiame
en tus pendientes.
Rodéame con tus anillos
y déjame ir contigo, déjame ir.

Déjame ir a dónde vayas, déjame ir
muchacha, entre el gozo y la pena
abrazado contra el poema
que lees a escondidas.

Bostezará perezosa la ciudad
cuando marques la hora y abras las ventanas del despacho
y te sacudas los pájaros
que hacen nido de tu pelo,
te dice el corazón
que el pájaro enjaulado, muere.

Ellos me traen en sus plumas sueños y latidos
cuando sus picos golpean mis cristales
y me cuentan
la historia blanca y pequeña
que entre cuatro paredes se marchita.

Pían
que muere la primavera
que no pueden salir a pasear.
Déjame ir contigo, déjame ir.
Déjame ir a donde vayas, déjame ir
muchacha y aviva el rostro.

Piensa que todavía nos queda
el camino de tus pájaros
para volarlo tú y yo, con ellos.

Autor del poema: Joan Manuel Serrat

83.33%

votos positivos

Votos totales: 18

Comparte:

CANCIÓN DE LA DISTANCIA

Mirarás un país turbio entre mis ojos,
mirarás mis pobres manos rudas,
mirarás la sangre oscura de mis labios:
todo es en mí una desnudez tuya.

Venía por arbolados la voz dulce
como acercando un bosque húmedo y fresco,
y una estrella caía duramente,
fija, la antigua cicatriz de un beso.

De arena parecían los cielos, y volvía
poseso del rumor que cual dos alas
me ciñó en una ronda inacabable,
me ciñó al fin la flor de tu palabra.

¿Qué rojea en la noche sino el puro
labio tuyo? y corazón, estrella y sueño,
mueve un solo vaivén que lejos fluye,
turbio como distancia y como ruego.

Tu desnudez verás en mis ojos absortos,
mirarás mi horizonte que roe una fogata,
tú, que no serás nunca sino masa de llamas,
en mi honda noche de árboles, callada.

Desnudo en mi fervor y tú en tu sangre,
es más que seda suave este silencio,
en esta noche ancha en que germina
todo y palpita todo, aromas y luceros.

Volver cuando anoche en canto y frondas
y rumia el viento que lo aleja todo:
ya no veré sino una palma muda
y el cielo, un áureo torbellino, en torno.

Volver, los cielos parecían de arena,
ha mucho, hace un instante, ha mucho tiempo;
y nadie ha de quitarme esta noche en que fuiste
larga y desnuda carne vestida de mi aliento.

Volver la senda turbia oyendo al viento
rumiar lejos, muy lejos, de los días.
Por mi canción conocerás mi valle,
su hondura en mi sollozo has de medirla.

Autor del poema: Aurelio Arturo

83.33%

votos positivos

Votos totales: 12

Comparte:

VOLVERÁN LAS OSCURAS GOLONDRINAS

(Cantado por Nacha Guevara)

Volverán las oscuras golondrinas
En tu balcón sus nidos a colgar
Y otra vez, con el ala en tus cristales,
Jugando llamarán.
Pero aquellas que el vuelo refrenaban
La hermosura y la dicha contemplar,
Aquellas que aprendieron nuestros nombres,
Esas no volverán.
Esas no volverán.
Esas no volverán.
Esas no volverán .

Volverán las tupidas madreselvas
De tu jardín, las tapias a escalar
Y otra vez a la tarde aún más hermosas
Sus flores abrirán.
Pero aquellas cuajadas de rocío
Cuyas gotas mirábamos temblar
Y caer como lágrimas del día
Esas no volverán.
Esas no volverán.
Esas no volverán.
Esas no volverán .

Esas no volverán
Esas no volverán
Esas no
Volverán del amor en tus oídos
Las palabras ardientes a sonar.
Tu corazón de su profundo sueño
Tal vez despertará.
Pero muda y absorta y de rodillas,
Como se adora a dios ante su altar,
Como yo te he querido desengáñate,
Así no te querrán.
Así no te querrán.
Así no te querrán.
Así no te querrán.
Esas no volverán.
Esas no volverán.
Esas no volverán.

Autor del poema: Gustavo Adolfo Bécquer

80.50%

votos positivos

Votos totales: 200

Comparte:

DEBO PARTIRME EN DOS

No se crean que es majadería.
Que nadie se levante aunque me ría.
Hace rato que vengo lidiando con gente
que dice que yo canto cosas indecentes.

Te quiero, mi amor,
no me dejes solo.
No puedo estar sin tí
mira que yo lloro.

¿No ven?, ya soy decente:
me fue fácil.
Que el público se agrupe y que me aclame.
Que se acerquen los niños,
los amantes del ritmo.
Que se queden sentados los intelectuales.
Debo partirme en dos.

Unos dicen que aquí,
otros dicen que allá
y sólo quiero decir,
sólo quiero cantar
y no importa la suerte
que pueda correr
una canción.
Unos dicen que aquí,
otros dicen que allá
y sólo quiero decir,
sólo quiero cantar,
y no importa que luego
me suspendan la función.

Yo también canté en tonos menores.
Yo también padecí de esos dolores.
Yo también parecía cantar como un santo.
Yo también repetí en millones de cantos:

Te quiero, mi amor,
no me dejes solo.
No puedo estar sin tí
mira que yo lloro.

Pero me fui enredando en más asuntos
y aparecieron cosas de este mundo:
«Fusil contra fusil», «La canción de la Trova»;
y «la era pariendo» se puso de moda.
Debo partirme en dos.

Unos dicen que aquí,
otros dicen que allá
y sólo quiero decir,
sólo quiero cantar
y no importa la suerte
que pueda correr
una canción.
Unos dicen que aquí,
otros dicen que allá
y sólo quiero decir,
sólo quiero cantar,
y no importa que luego
me suspendan la función.

Yo quería cantar encapuchado
y después confundirme a vuestro lado
aunque así no tuviera amigos y citas
y algún que otro favor de una chica bonita.
pero,

Te quiero, mi amor,
no me dejes solo.
No puedo estar sin tí
mira que yo lloro.

No voy a repetir ese estribillo.
Algunos ojos miran con mal brillo
y estoy temiendo ahora no ser interpretado:
casi siempre sucede que se piensa algo malo.
Debo partirme en dos.

Unos dicen que aquí,
otros dicen que allá
y sólo quiero decir,
sólo quiero cantar
y no importa la suerte
que pueda correr
una canción.
Unos dicen que aquí,
otros dicen que allá
y sólo quiero decir,
sólo quiero cantar,
y no importa que luego
me suspendan la función.

Autor del poema: Silvio Rodríguez

80.00%

votos positivos

Votos totales: 10

Comparte:

CANCIÓN DE AMOR Y SOLEDAD

Como en el áureo dátil de solitaria palma,
orillas de mi predio todo el valle resuena,
tú en mi corazón, dátil amargo, tiemblas
y te inclinas desnuda, sollozo y carne trémula.

De palma en que acongojase con vago son el viento,
dátil fiel donde todos los horizontes suenan,
mi corazón es una carne tuya, tu carne,
cantando entre distancias y entre nieblas.

Tuyo es el viento y el rumor, dorados,
tuyo el canto en la noche sin palmeras,
tuyo el trémolo al fondo de los huesos,
y el palpitar oscuro de mis venas.

El país que en tus ojos vive entre parpadeos,
canta en mí con su largo sollozar innegable,
rumora en mí, y el ansia de tu boca madura,
y rumoran sin fin los valles de tu carne.
Oscura tú, y entre tu luz sin tregua,
eres un son tan hondo, tan hondo y dolorido.

Dátil maduro, dátil amargo, escucha
mi corazón al filo del viento, tu gemido,
tu gemido gozoso, tu olor de flor abierta.
Mecido en ti, lleno de ti se escucha,
y da al viento ceniza de sus gritos.

Autor del poema: Aurelio Arturo

80.00%

votos positivos

Votos totales: 5

Comparte:

CANTARES

(Cantado por Joan Manuel Serrat)

Todo pasa y todo queda
Pero lo nuestro es pasar
Pasar haciendo caminos
Caminos sobre el mar

Nunca perseguí la gloria
Ni dejar en la memoria
De los hombres mi canción;
Yo amo los mundos sutiles
Ingrávidos y gentiles
Como pompas de jabón

Me gusta verlos pintarse
De sol y grana, volar
Bajo el cielo azul, temblar
Súbitamente y quebrarse...

Nunca perseguí la gloria

Caminante son tus huellas
El camino y nada más;
Caminante, no hay camino
Se hace camino al andar

Al andar se hace camino
Y al volver la vista atrás
Se ve la senda que nunca
Se ha de volver a pisar

Caminante no hay camino
Sino estelas en la mar

Hace algún tiempo en ese lugar
Donde hoy los bosques se visten de espinos
Se oyó la voz de un poeta gritar
"Caminante no hay camino
Se hace camino al andar..."

Golpe a golpe, verso a verso

Murió el poeta lejos del hogar
Le cubre el polvo de un país vecino
Al alejarse le vieron llorar
"Caminante no hay camino
Se hace camino al andar..."

Golpe a golpe, verso a verso

Cuando el jilguero no puede cantar
Cuando el poeta es un peregrino
Cuando de nada nos sirve rezar

"Caminante no hay camino
Se hace camino al andar..."

Golpe a golpe, verso a verso

Autor del poema: Antonio Machado

79.09%

votos positivos

Votos totales: 416

Comparte:

SON TUS OJOS

Son tus ojos los que busco
No los encuentro;
Son tus labios los que quiero
Ver sonreír
Pero ellos me son tan ingratos
Pero ellos se burlan de mí, es así

Solo quiero decirte un secreto
Solo quiero mi dicha expresar
Solo quiero cantar los cantares
Que repiten las olas del mar

El amor que tú me diste
Yo lo conservo
Grabado en mi memoria
Siempre estará
Un recuerdo del alma te pido:
No me olvides, no te olvidaré, es así

Solo quiero decirte un secreto
Solo quiero mi dicha expresar
Solo quiero cantar los cantares
Que repiten las olas del mar.

Autor del poema: Violeta Parra

78.13%

votos positivos

Votos totales: 32

Comparte:

TE DOY UNA CANCIÓN

Cómo gasto papeles recordándote,
cómo me haces hablar en el silencio,
cómo no te me quitas de las ganas
aunque nadie me ve nunca contigo.
Y cómo pasa el tiempo que de pronto son años
sin pasar tú por mí, detenida.

Te doy una canción si abro una puerta
y de las sombras sales tú.
Te doy una canción de madrugada,
cuando más quiero tu luz.
Te doy una canción cuando apareces
el misterio del amor,
y si no lo apareces no me importa:
yo te doy una canción.

Si miro un poco afuera me detengo:
la ciudad se derrumba y yo cantando,
la gente que me odia y que me quiere
no me va a perdonar que me distraiga.
Creen que lo digo todo, que me juego la vida,
porque no te conocen ni te sienten.

Te doy una canción y hago un discurso
sobre mi derecho a hablar.
Te doy una canción con mis dos manos,
con las mismas de matar.
Te doy una canción y digo: “Patria”,
y sigo hablando para ti.
Te doy una canción como un disparo,
como un libro, una palabra, una guerrilla:
como doy el amor.

Autor del poema: Silvio Rodríguez

77.78%

votos positivos

Votos totales: 18

Comparte:

CANCIÓN: CANTOR DE CANCHUNCHÚ FLORIDO

Enviado por carlos55  Seguir

CANCIÓN: CANTOR DE CANCHUNCHÚ FLORIDO
AUTOR: CARLOS ANDRÉS LÓPEZ BLANCO
GÉNERO MUSICAL: MERENGUE ORIENTAL

I
FUISTE UN GRAN TROVADOR
AMANTE DE LA NATURA
UN HOMBRE QUE DESDE NIÑO
TRABAJÓ LA ACRICULTURA (BIS)
2
CANTABA CON SENTIMIENTO
PARA ALEGRARLE EL DÍA
A UNA HERMOSA MUJER
LLAMADA “JUANA MARÍA” (BIS)
CORO
DON LUIS MARIANO RIVERA
POR SU PUEBLO MUY QUERIDO
TÚ FUISTE UN GRAN CANTAAUTOR
DE MI CANCHUNCHU FLORIDO (BIS)
3
SE ACOSTABA EN SU HAMACA
BUSCABA DARLE COLOR
A ESAS BELLAS CANCIONES
QUE CANTABA CON AMOR (BIS)
4
CAUTIVABA A SU PUEBLO
CON UN BUEN MERENGUITO
ESA HERMOSA CANCIÓN
QUE LLAMABA “LUCERITO” (BIS)

75.00%

votos positivos

Votos totales: 4

Comparte:

Madre querida

Enviado por carlos55  Seguir

Titulo: Madre querida
Autor: Carlos Andrés López Blanco


I

Es mi vida, mi alma

Mis ojos mi canción

Eres madre bendita

dueña de mi corazón

II

Eres madre querida

El motivo de mi existir

Me guía por buen sendero

Para amar y compartir….

Coro

Estas….metida en mi alma

Dentro de mi corazón……

Llenas madre mía

Mi vida de tu amor… (BIS)


75.00%

votos positivos

Votos totales: 4

Comparte:

Desde el 11 hasta el 20 de un total de 27 Poemas de canciones

Añade tus comentarios