POR QUÉ ESTANDO ÉL DURMIENDO LO BESÓ SU AMIGA  

Vos cometistes traición,
pues me heristes, durmiendo,
de una herida que entiendo
que será mayor pasión
el deseo de otra tal
herida como me distes,
que no la llaga ni mal
ni daño que me hecistes.

Perdono la muerte mía;
mas con tales condiciones,
que de tales traiciones
cometáis mil cada día;
pero todas contra mí,
porque, de aquesta manera,
no me place que otro muera
pues que yo lo merecí.

Autor del poema: Jorge Manrique

64.46%

votos positivos

Votos totales: 166

Comparte:
Añade tus comentarios