VERANO
Una llama de viento
extiende su lamento;
en un valle de! alma,
mece una palma
un sutil oleaje
a una altura salvaje;
bajo la hierba mansa,
triste descansa
el cansancio terreno,
y, ebria, bajo el veneno
del Sol, se precipita
esta maldita
raza de mis pasiones
y de mis sensaciones;
que va a salto de cabras,
y sus palabras
cruzan el valle, llegan
a las grutas y juegan
en las selvas sagradas
de tus miradas
y dicen: —"Los acentos
que hay dentro de los vientos
son otros que sus ruidos,
los gemidos"
de la luz precipita
al fuego que gravita;
por los poros del Alma
suda la calma...
Y yo observo detrás
de sus palabras, las
cifras en líneas que
jamás sumé.
Autor del poema: Alfonso Cortés
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