Vuestros poemas
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Enviado por encantador Seguir
Observo tu belleza desde lejos, elegiste robar mi corazón, miradas que buscan el pasado. Todos los viernes te desconectas del mundo. Llevas doble vida, no tienes fe, armas líos en lugares donde hay paz. Cartas marcadas, luchas por dos amores. Cicatrices que te acompañan en tu piel. Cubriendo con ropa elegante para no te señalen.
Esperando que empiece a anochecer, me gusta tu perfume. Por la noche contando las estrellas, mientras te esperaba iba a armar un camino hecho de pétalos, cuando comience la oscuridad. No puedo dejar de contemplar tus ojos que iluminan mi corazón. Todas las flores suspiran por ti. El alma rodea la pasión.
Quince primaveras, sueños con príncipe azul, esclavitud de un amor del pasado. Se protege en los cuentos de hadas. Guardas el primer beso te hizo tocar el cielo con las manos. Esperando las llamadas por las noches, fotos recortadas. Apoyo incondicional a distancia. Testigos que no hablan. Envidia almacenada en una bolsa de papel. Alma alborotada para volverte abrazar y volver a empezar.
La Vida
Enviado por ashesbeginning Seguir
Bendito sea el cielo que te ve,
Te ve fijamente y sin cesar,
Aunque te estés cubriendo bajo un techo, ya sea observándolo o llevando a cabo cualquier otra tarea.
Hermoso el pensamiento aquel que tienes sobre los sueños, tal vez no creas o no les tengas suficiente fé, pero eso depende de uno mismo, tú decides en quién creer.
No hay que ceder ante los altibajos de la vida, pues estos son los que nos proporcionan a nosotros la sabiduría, ¿Y qué mejor que la experiencia es la mejor fuente de sabiduría?
En las noches más frías, en las tardes más calurosas, en las mañanas más calidas, habrá un sentimiento de ausencia y encontrar ese algo para ya no sentir esa ausencia es algo que le da sentido a la vida. Pues esa ausencia tiene que ser llenada con conocimiento, y el conocimiento debe de ser compartido, lo cual, al tener una conversación, al enseñar es lo que vuelve amenas nuestras vidas.
Te fuiste
Te escapazte nuevamente. Fue ahí donde entendí que te tenía retenida! Tanto que debiste escapar ! Pero es que te quería tanto!
Es de esos amores que duelen pero que más da hiciste lo que yo nunca he hecho
Te amaste vos antes que a alguien por eso te fuiste ! Y eso hizo que te amará aún más
Recordar cómo te fuiste me lastimariá pero el hecho de que hubiese alguien más y aún así me dijeras mi amor dolió más.
SU CABELLO SU PIEL SU OLOR...
Su cabello...
Su piel...
Su olor...
¡Sus ojos…esos ojos!
Su forma de hablar... de pensar.
Sus manos...
Su mirada cómplice que me llena de deseo.
Un trabajo...
Un personal, que nada conoce, pero tanto prohíbe... que tanto nos limita.
Una cotidianidad que nos llevo a explorar...
Un lugar, cada hora de oscuridad... ese toque de adrenalina que nos hace disfrutar...
Sin compromisos...
Sin querernos, aun queriéndonos...
Sin vernos...
Sin exponernos...
Sin pensarlo...
Sin imaginarlo...
Aquí separados...
Aquí juntos...
Aquí en silencio...
Aquí cómplices...
Aquí... viviendo...
Perfecta
Cuando por primera vez suspiré
Al cielo miré y en tu voz silenciosa y preciosa recordé,
Ese momento era tan perfecto
Perfecto como tú al sonreír,
Cómo cuando susurras las mil palabras del amor
Que una a una dan calor
Y la suave brisa del abrigo llega
Y cubre nuestro cuerpos abatidos...
Abatidos no de dolor, sino de pasión
Que un día han de darse todo
Y a lo más profundo del corazón recurrir.
Enrique Misal
Solo
Enviado por chucho1980 Seguir
Solo
Huecos mudos, nudos secos
Llega el sueño y me atropellan
me despierto y retroceden
Solo
Cuentos viejos, ciegos nuevos
Cataratas de sombras, ruidos, gritos
Noches falsas.
Solo solo solo.....
Si pudiera simplemente desprender el Alma
Y volar al cielo
Y soñar el vuelo
Si pudiera simplemente desprender el Alma
Discusión
Abrí la puerta del baño
y lo vi con tanta calma,
más al verlo sentí el daño
que abría heridas del alma.
Por mis arterias y venas
la sangre me recorría,
cual ardientes cadenas,
con su fuego enfurecía.
La rabia en su regazo
me envolvió a su antojo,
y llenome cual ocaso
todo mi mundo de rojo.
Y con la vista nublada
le grité sin mesura:
“¡Devuélveme mi amada,
mi vida y mi cordura!”.
Todo el odio que contuve
lo lancé en un alarido.
“¡Lo bueno que yo tuve
por tu culpa lo he perdido!”.
Los resonantes espejos
atestiguaron mi lamento
y gracias a mis complejos
los empañé con mi aliento.
Y coordinados en tiempo
lanzome él sus insultos,
mientras el impasible viento
llevose nuestros tumultos.
Y a causa de tal clamor
nos irrumpía alguien más,
que con piscas de temor
entraba a hacer la paz.
Más viendo la situación
quedose el chico perplejo,
al encontrar mi discusión;
gritándole a un pobre espejo.
Rocío
Lágrimas de un ángel mañaneras
causadas por la pérdida de un alma,
van rociando desde mares a praderas;
caminando con los pasos de la calma.
Me despierto con la ventana empañada,
empañada por las gotas de rocío;
y despejándome la cara enmarañada,
veo los carros que me llenan de vacío.
Las nubes de tristeza a golpeteos
van pintan las aceras y el asfalto,
veo y veo, pero es que a ti no te veo,
quizá debería ver muchísimo más alto.
O quizá mejor sea volver hacía atrás,
a aquel salón semanas antes de tu muerte,
reír sentado junto a todos los demás,
salir pensando que después volvería a verte.
Fascinaba tu pasión en los idiomas,
podías hablar de ellos decenas de años;
te enviaré recados en diez mil palomas,
y en inglés mis mensajes de "te extraño".
Más no importa lo que escriba justo ahora,
yo no escribo las letras para volar;
tú te juntabas con las letras voladoras,
volaste tanto que ya no te veo brillar.
Dejaste huérfana una familia de centenas,
Eras la vela y ahora tengo tanto frío;
acomplejado por los recuerdos, las penas,
hoy le lloro a las gotas de rocío.
Soledad
Estoy feliz, triste y abatido,
estoy bastante apático en verdad.
Encerrado, a oscuras voy perdido
y lo único que tengo es el sonido,
de los gritos de silencio en soledad.
Estoy cansado, eufórico, agobiado,
deseando poder escapar sin más,
la rutina ya me tiene acorralado
amenazante y ponderante ha atacado,
me dice que no escaparé jamás.
Encerrado se vuelve más poderosa,
y contigo la evapora tu llamado,
¡que salvación tan maldita y ostentosa!,
esta salida resulta más tenebrosa
porque sé que no puedo estar a tu lado.
Soledad maldita, ¡Sal de mí!,
me dejaste sin agua en este desierto,
entraste por puertas que nunca abrí,
arrebatándome las ganas de seguir,
desamparado y vivo, pero con alma de muerto.
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