235 Poemas de desamor
MI AMOR ES UNA FIEBRE QUE INCESANTE...
Mi amor es una fiebre que incesante
ansía lo que su virus alimenta,
porque en mi mal mi gusto se apacienta
y es por sí enfermo el apetito amante.
Ya, viendo mi doctor (la vigilante
razón) que no haga del caso ni cuenta,
me abandonó, y el ánima sedienta
corre a su abismo, aunque lo ve adelante.
Salvación para mí, ni la hay ni la quiero:
todo yo soy locura, inquietud, ira;
loco en cuanto imagino y vocifero,
y víctima infeliz de una mentira
te juré honrada y franca; y mi amor tierno
¿qué halló en ti? Noche oscura, negro infierno.
LA MUFA
Vos ves la Cruz del Sur,
respirás el verano con su olor a duraznos,
y caminás de noche
mi pequeño fantasma silencioso
por ese Buenos Aires,
por ese siempre mismo Buenos Aires.
Quizá la más querida
Me diste la intemperie,
la leve sombra de tu mano
pasando por mi cara.
Me diste el frío, la distancia,
el amargo café de medianoche
entre mesas vacías.
Siempre empezó a llover
en la mitad de la película,
la flor que te llevé tenía
una araña esperando entre los pétalos.
Creo que lo sabías
y que favoreciste la desgracia.
Siempre olvidé el paraguas
antes de ir a buscarte,
el restaurante estaba lleno
y voceaban la guerra en las esquinas.
Fui una letra de tango
para tu indiferente melodía.
AMOR NO ES...
Ya ni versos escribo, sólo queda
este soñar de lágrimas teñido,
y una queja distante en el olvido
azul lejano de tu voz de seda.
Amor no es, es algo que remeda
la desmembranza del rosal caído,
donde ya ni las sombras hacen nido,
ni el viento en rondas de cristal enreda.
Algo que ayer fue lirio de mi fuente,
frescura de mi noche, y suavemente
luminar en mi senda florecida.
Algo que en mi agonía aún retengo,
porque es la única verdad que tengo
y no puedo arrancarla de mi vida.
VÁMONOS CORAZÓN
Vámonos, corazón, hemos perdido,
ya nunca espigarán tus ilusiones.
Recoge tu esperanza y tus canciones
y partamos en busca del olvido.
Vámonos, corazón, ya tu latido
sólo podrá contar renunciaciones.
Guarda su nombre con tus oraciones
y si debes sangrar, sangra escondido.
Vámonos, corazón, tu fe no existe.
Al fin y al cabo tu naciste triste
y triste en cualquier puerto morirás.
Vámonos, corazón, ya no la esperes.
Bendice su recuerdo si así quieres,
pero marchemos sin mirar atrás.
ESPERA
Te esperé con la sangre detenida
sobre el silencio en ascuas de tu ausencia.
Te esperé soportando la existencia
como un lebrel al pie de tu partida.
Te esperé casi al borde de la herida
y a dos pasos no más de la demencia.
Te esperé en la angustiosa transparencia
de aquella noche en el reloj vencida.
Pero qué inútil la mortal espera:
Sin pensarlo cité la primavera
cuando el invierno helaba mis rosales.
Y hoy que casi olvidaba tu presencia,
me estoy enamorando de tu ausencia
a través de mis propios madrigales.
El Tiempo
Hay cosas que permanecen en el tiempo
cosas que aún duelen, que no olvido,
que quisiera repetir para revivirlas
y todas ellas viven dentro de ti.
Cosas no aprendidas que el tiempo señaló
sin miedos, sin prisa, solo estaban allí,
como lecciones de vida que dejaste ir
y aún permanecen en tu tiempo.
gbl
05/09/2017
Derechos Reservados de Autor
AFTER SUCH PLEASURES
Esta noche, buscando tu boca en otra boca,
casi creyéndolo, porque así de ciego es este río
que me tira en mujer y me sumerge entre sus párpados,
qué tristeza nadar al fin hacia la orilla del sopor
sabiendo que el placer es ese esclavo innoble
que acepta las monedas falsas, las circula sonriendo.
Olvidada pureza, cómo quisiera rescatar
ese dolor de Buenos Aires, esa espera sin pausas ni
esperanza.
Solo en mi casa abierta sobre el puerto
otra vez empezar a quererte,
otra vez encontrarte en el café de la mañana
sin que tanta cosa irrenunciable
hubiera sucedido.
Y no tener que acordarme de este olvido que sube
para nada, para borrar del pizarrón tus muñequitos
y no dejarme más que una ventana sin estrellas.
LA LENTA MÁQUINA DEL DESAMOR...
La lenta máquina del desamor,
los engranajes del reflujo,
los cuerpos que abandonan las almohadas,
las sábanas, los besos,
y de pie ante el espejo interrogándose
cada uno a sí mismo,
ya no mirándose entre ellos,
ya no desnudos para el otro,
ya no te amo,
mi amor.
VIVIR DENTRO DE TUS HUESOS...
Vivir dentro de tus huesos y dormir recargado a tu sombra
Pues se tritura con la pintura tu cabello y yo estoy cansado de volver a traerlo,
mientras tanto mis dedos se resbalan frente al televisor dormido,
con un pijama roja camino y resbaló por una cáscara de obra que comencé a escribir,
,
soy un lago seco carcomido por la tierra y que a mis 17 años me tuve que desterrar ,
Mi silencio produce un sonido psicópata de mis recuerdos más olvidados
Vivir debajo de una roca y dormir abrazado de tus huesos
¡Ya lo sabes! El amor es peligroso para tu corazón,
como las ganas de ahorcar mi lengua para que escupa lo que siente pues está saturada por lágrimas de saliva y todo lo provoca tu cruel presencia
Soy tu humilde servidor
Sueñan felices los muertos mientras yo sueño y describo su muerte,
cosiéndome el cabello con una aguja sin filo y arrancándome la piel con un filoso cuchillo,
voy a desamarrar esta máquina que me tiene preso y condenado a escribir y al mismo tiempo me rescata de mi soledad haciéndome serio y callado,
exprimiendo mis ojos para no dejar de observar todo rojo,
todo frio,
mis poros comienzan a toser las toxinas de un nuevo día festivo,
me corto con tus labios mientras deslizo tu ropa,
vivir leyéndote la boca y embriagarme con tu sonido,
estar afuera de tus huesos y ser asesinado por haber dormido,
vivir dentro de tus huesos y dormir recargado a tu sombra escribiendo lo que he vivido
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