510 Poemas de amor 

No dejes de visitar los 50 mejores poemas de Yavendrás, según vuestros votos.

tu boca

Enviado por daniel  Seguir

Tu boca hecho con mágicos pinceles,
más que boca es cualquier húmeda granada
que pide tentadora y encarnada
un beso audaz que la derrita en mieles.

Cuando en tus risas entreabrirlas sueles
se difunde en la atmósfera extasiada
el grato olor de fruta sazonada
que hay en la intimidad de los vegetales.

Es abreviada gruta de frescura
constreñido paréntesis de flores
y animado jardín en miniatura.

Yo la besare en férvido embeleso
para sentir, muriéndose de amores,
la eternidad en la embriagues de un beso.

81.08%

votos positivos

Votos totales: 111

Comparte:

Dime quien...

Enviado por garbo  Seguir

¿Que no te veo.?
¿Que no te siento.?
¿Que estas tan lejos.?

Dime quien te dijo eso...

Si te miro en mis recuerdos,
si te siento a qui en mi pecho
y en mi corazón te llevo.

81.08%

votos positivos

Votos totales: 148

Comparte:

AL ROMPER EL DÍA

Es cierto, es ya de día, ¿y a nosotros
qué nos importa? ¿Piensas levantarte
de nuestra cama? ¿Por qué, porque hay luz?
¿Nos acostamos porque anochecía?
Amor, que aquí nos trajo a pesar de la noche,
debiera mantenernos juntos pese al día.

La luz no tiene lengua, es toda ojo;
si hablar pudiera como puede espiar,
lo peor de que podría ser testigo
es de que, estando bien, querría quedarme
y de que tanto amé a mi corazón y honor
que no acepté alejarme de su dueño.

¿Te debe alejar tu trabajo de mí?
Oh, ése es el más cruel mal del amor:
el pobre, el falso, el flojo aceptan
amar con calma, no el hombre ocupado.
Quien tiene trabajo y seduce a una dama perjura
igual que un hombre casado que corteja a otra.

Autor del poema: John Donne

81.08%

votos positivos

Votos totales: 37

Comparte:

MISTERIOS

Alguien abre una puerta
y recibe el amor
en carne viva.
Alguien dormido a ciegas,
a sordas, a sabiendas,
encuentra entre su sueño,
centelleante,
un signo rastreado en vano
en la vigilia.
Entre desconocidas calles iba,
bajo cielos de luz inesperada.
Miró, vio el mar
y tuvo a quién mostrarlo.
Esperábamos algo:
y bajó la alegría,
como una escala prevenida.

Autor del poema: Ida Vitale

80.95%

votos positivos

Votos totales: 21

Comparte:

El amor

Enviado por 63863373  Seguir

¿Por qué
el amor aveces
no se deja amar..?
¿Por qué
se enfría después
de arder en la sangre?
¿A donde va
cuando no llega a nuestro encuentro...?
¿por qué necesita recompensa cuando se enamora?.
Por qué el amor
con su idioma esencialista
y su caligrafía perfecta,
no escribe
una historia verdadera?...

80.95%

votos positivos

Votos totales: 21

Comparte:

ELLA

Esta novia del alma con quien soñé en un día
fundar el paraíso de una casa risueña
y echar, pescando amores, en el mar de la vida
mis redes, a la usanza de la edad evangélica,

es blanca como la hostia de la primera misa
que en una azul mañana miró decir la tierra,
luce negros los ojos, la túnica sombría
y en un ungir las heridas las manos beneméritas.

Dormir en paz se puede sobre sus castos senos
de nieves, que beatos se hinchan como frutas
en la heredad de Cristo, celeste jardinero;

tiene propiedades hondas y los labios de azúcar
y por su grave porte se asemeja al excelso
retrato de la Virgen pintado por San Lucas.

Autor del poema: Ramon Lopez Velarde

80.85%

votos positivos

Votos totales: 188

Comparte:

POEMA 40

¿Qué mala mente a ti, pobrecillo de Rávido,
te lleva de cabeza hacia mis yambos?
¿Qué dios por ti no bien invocado
te dispone a incitar una malsana pelea?
¿Acaso es para arribar a las bocas de la gente?
¿Qué quieres? ¿Como sea ser conocido deseas?
Lo serás, puesto que a mis amores
quisiste amar, con larga condena.

Autor del poema: Catulo

80.77%

votos positivos

Votos totales: 26

Comparte:

Sin ti

Enviado por elpoetamarginal  Seguir

Son tristes las mañanas
cuando no amaneces conmigo en la cama
pero mas triste es ver el amanecer por la ventana
sin la compañía de una dama

El tiempo y el amor son complementos
porque las palabras se las lleva el viento
por eso yo no quiero una mujer
que me diga que es la princesa del cuento
y nuestra historia termine en lamento.

80.67%

votos positivos

Votos totales: 150

Comparte:

A UNA DAMA MUY HERMOSA

Gentil dama muy hermosa,
en quien tanta gracia cabe,
quien os hizo que os alabe,
que mi lengua ya ni osa
ni lo sabe.
Y pues nombre de hermosa
os puso como joyel,
¿quién osará sino Aquél
cuya mano poderosa
hizo a vos cual hizo a Él?

Compara que la rica febrería
quien la haze es quien la'smalta,
pues hermosura tan alta,
que la loe quien la cría
tan sin falta.
Y si alguno acá quisiere
pensar que quiere loaros,
vaya a veros, y si os viere,
cuando acabe de miraros
no sabrá sino adoraros.

Porque aunque haga la cara
en perfectión el pintor,
siempre tiene algún temor
que la hiziera, si mirara,
muy mejor.
Mas quién a vos os crió
no tiene temor d'aquesto,
porque en todo vuestro gesto
las figuras qu'Él pintó
gran gentileza les dio.

Fin Assí que hallo que Dios
y su Madre gloriosa
no criaron tan preciosa
hermosura como vos,
ni tan hermosa.
Y pues tanta perfectión
os dieron sin diferencia,
a vuestra gran excelencia
escrivo por conclusión:
«Dios haga vuestra canción.»

Autor del poema: Jorge Manrique

80.63%

votos positivos

Votos totales: 191

Comparte:

SE QUERÍAN

Se querían.
Sufrían por la luz, labios azules en la madrugada,
labios saliendo de la noche dura,
labios partidos, sangre, ¿sangre dónde?
Se querían en un lecho navío, mitad noche, mitad luz.

Se querían como las flores a las espinas hondas,
a esa amorosa gema del amarillo nuevo,
cuando los rostros giran melancólicamente,
giralunas que brillan recibiendo aquel beso.

Se querían de noche, cuando los perros hondos
laten bajo la tierra y los valles se estiran
como lomos arcaicos que se sienten repasados:
caricia, seda, mano, luna que llega y toca.

Se querían de amor entre la madrugada,
entre las duras piedras cerradas de la noche,
duras como los cuerpos helados por las horas,
duras como los besos de diente a diente solo.

Se querían de día, playa que va creciendo,
ondas que por los pies acarician los muslos,
cuerpos que se levantan de la tierra y flotando...
Se querían de día, sobre el mar, bajo el cielo.

Mediodía perfecto, se querían tan íntimos,
mar altísimo y joven, intimidad extensa,
soledad de lo vivo, horizontes remotos
ligados como cuerpos en soledad cantando.

Amando. Se querían como la luna lúcida,
como ese mar redondo que se aplica a ese rostro,
dulce eclipse de agua, mejilla oscurecida,
donde los peces rojos van y vienen sin música.

Día, noche, ponientes, madrugadas, espacios,
ondas nuevas, antiguas, fugitivas, perpetuas,
mar o tierra, navío, lecho, pluma, cristal,
metal, música, labio, silencio, vegetal,
mundo, quietud, su forma. Se querían, sabedlo.

Autor del poema: Vicente Aleixandre

80.49%

votos positivos

Votos totales: 41

Comparte:

Desde el 121 hasta el 130 de un total de 510 Poemas de amor

Añade tus comentarios